Se fabrican alfombras en varias fibras naturales, pero me voy a centrar en las que considero son más fáciles de limpiar, más neutras a la hora de decorar y mejores para los alérgicos.
Entre los materiales más ecológicos para una alfombra, destacan las fibras vegetales. Aunque se utilizan otros materiales como algas (que presentan la ventaja de ser impermeables) o juncos y se está empezando a desarrollar el tencel, una fibra vegetal que viene del eucalipto, los materiales estrella además del conocido algodón y la lana ecológica siguen siendo el yute, el sisal, el bambú y la fibra de coco.
En los materiales reciclados el número uno es un tipo de hilo fabricado a partir de plásticos recogidos del mar, botellas de plásticos PET, restos de redes de pesca, etc.
Con éste hilo se fabrican también unas alfombras que las podemos usar en exteriores y zonas húmedas de interior como cocinas y baños. El PET es resistente al frío, calor y a la humedad. Tienen un tacto muy suave y son muy fáciles de limpiar ya que se pueden mojar.
Puedes encontrarlas con múltiples diseños y tamaños, con lo que podrás integrar en cualquier estilo decorativo.
Las alfombras de algas marinas, son de las mejores para la alergia a los ácaros del polvo debido a su alta resistencia al agua y su capacidad para reducir efectivamente el crecimiento del moho. Los ácaros están siempre en la superficie del tejido y solo necesitas usar un paño para limpiarlos. El inconveniente es que este tipo de alfombra suele tener una superficie algo gruesa y un poco áspera al tacto.
La fibras Tencel son increíblemente suaves y brillantes, lo cual crea alfombras y moquetas con textura similar a la de la seda que refleja maravillosamente luz. Las propiedades de absorción de la humedad, hacen que albergue menos bacterias.
Es biodegradable y su ciclo de fabricación es cerrado, lo que quiere decir es que casi todos los elementos utilizados son reutilizados y reciclables.
Su color natural es casi blanco, pero podemos encontrarlas en diferentes colores de tintes naturales.
El yute es similar a la planta de sisal, pero es más suave al tacto.
La alfombra de yute de buena calidad ha de presentar un color homogéneo de la fibra, el acabado en los remates o bordes pulidos y sin deshilachar y el tensado del tejido cuanto más tupido sea tendrá mayor resistencia. Suelen ser económicas debido que su cultivo es muy rápido y en grandes cantidades. Combinan prácticamente con cualquier estilo de decoración. Las puedes usar en cualquier estancia de la casa, dormitorio, salón, terraza, etc
Te animo a que incorpores alfombras en tu hogar, ayudan a crear ambientes cálidos con personalidad y sanos.
En el próximo blog, hablaré sobre las pinturas naturales.
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